Por
Miguel S. Bayona Valentín,
Ciudad de La Habana, Cuba.
Como me gustaría
comenzar esta historia diciendo
“Había una
vez…”, título
que llevaba un serial de
la televisión cubana
muy visto en los finales
de los años 80 y
principio de los 90, pero
a diferencia de las series
de ficción esto se
trata de una historia real.
Quiero pedir perdón
si piensan que me extiendo
un poco para resumir 5 años
de creado el Grupo electrónico
“El Acuarista Cubano”.
Para comenzar debemos remontarnos
al 9 de febrero de 2005,
día en que Roberto
Petracini con la colaboración
de Francisco Martínez,
Julio Martínez, Vivi
Garber y Daniel de Bonis,
dieron inicio al primer
foro de discusión
de acuaristas cubanos en
Internet.
El
Grupo "El Acuarista
Cubano" surgió
como una herramienta que
permite vincular entre si
a los acuaristas cubanos,
comenzando por los que dispusieran
de Internet y/o correo electrónico.
Para esto se dispuso de
una página WEB dentro
de un sitio argentino de
gran prestigio como es “El
Acuarista” de Roberto
Petracini. Precisamente
es Roberto quien diseña
y aloja la 1ra versión
de nuestra página
con el nombre de “El
Acuarista Cubano”
el 10 de Julio de 2003 y
un año después
es renovado el diseño
por el mismo quedando en
mente la versión
que muchos recordaran de
“Cuba en El Acuarista”.
El segundo paso fue habilitar
en la página una
planilla de registro en
la cual los aficionados
cubanos que visitaran la
página se registraran
y posteriormente se los
invitaría a suscribirse
al grupo electrónico.
Antes
de la existencia del grupo
en Yahoo!, los pocos acuaristas
cubanos que visitaban la
WEB “El Acuarista”
se registraban y sus datos
eran enviados por correo
postal a Omar Iruela en
Güines desde donde
Omar tomaba contacto postal
con ellos ya que aún
hoy no dispone de correo
electrónico.
Omar
Iruela, para quienes no
lo conozcan, presidió
en los finales de los 90
una pequeña agrupación
de acuaristas conocida en
todo el mundo como Aqua
Cuba. Posiblemente gracias
a las innumerables notas
y artículos que escribió
Iruela, el acuarismo cubano
era conocido en el exterior.
En cambio dentro de la isla,
sin revistas, publicaciones
o medios de difusión
que promuevan la acuariofilia
no había forma de
vincular a los aficionados
con Aqua Cuba.
Así
fue como “El Acuarista
Cubano” se transformó
en una doble herramienta:
era un medio para que los
aficionados realizaran consultas
y comenzaran a conocerse
y al mismo tiempo servía
para vincularlos con Aqua
Cuba.
Al
grupo electrónico
se han asociado 195 miembros
en su mayoría cubanos,
aunque en la actualidad
mucho más de la mitad
no cuentan con acceso a
Internet y mucho menos a
Yahoo!. Esto ha provocado
la falta de comunicación
entre gran parte de los
que ingresan sin dejar otros
datos para ser localizados.
Por suerte, aun con esta
desgracia, el club se ha
encaminado y marcha bien,
quizás un poco lento
para los más impacientes.
El
motor que le hacía
falta
Mi presencia en el grupo
fue netamente casual. Todo
comenzó un día
de esos que estoy a la caza
de algún detalle,
información o chisme
del mundillo de los peces.
Días antes había
ingresado a varios grupos
de Yahoo relacionados con
la acuariofilia, tanto en
ingles como en español,
lo importante era saciar
la sed de conocimiento que
me urgía. Al entrar
al sitio de “El Acuarista”
algo me llamó la
atención, entre todas
las banderas latinoamericanas
se encontraba la de Cuba.
Rápido y como un
niño chiquito, que
todo lo quiere saber, pinché
sobre esta y para mi sorpresa
los aficionados cubanos
contaban con un sitio en
Internet.
Luego
de llenar la planilla de
registro, ingreso en el
grupo “El Acuarista
Cubano” en Yahoo!,
un foro que aun desconocía.
No tardé en hacer
unas de las mías
al dar respuesta a un aficionado,
“… este
grupo está muerto…”
le decía a Alex Pérez
Borges. Días más
tardes recibo una respuesta
en privado dándome
un cachetazo por mi despectivo
comentario: “…
En uno de tus mensajes mencionas
que este grupo está
muerto. En realidad no creo
que esté muerto sino
que le faltan iniciativas.
No te olvides que este es
un grupo exclusivamente
dirigido a acuaristas residentes
en Cuba y que muchos no
tienen experiencia en manejarse
por correo electrónico
o por Internet (y en muchos
casos no pueden acceder
desde sus domicilios sino
desde el lugar de trabajo).
…
Creo que con un poco de
trabajo y algo de organización
dentro de Cuba, podremos
dar un envión a Aqua
Cuba…
…Si
dispones de algún
tiempo para dedicarle a
este grupo, tal vez podamos
darle un poco de vida, mejorando
las comunicaciones entre
los miembros y comenzando
a generar una corriente
de intercambio…”.
[Viernes, 29 Abril 2005-20:56]
Así respondía
Roberto Petracini a mi grosero
error.
Solo
la vergüenza y mi afición
por los peces me llevaron
a aceptar una difícil
responsabilidad, ser el
moderador del grupo electrónico,
pero quién mejor
que Roberto para hacer un
resumen de mi labor:
“…no
fue sino hasta que puse
en tus manos el desafío
de conducir el grupo que
El Acuarista Cubano realmente
tuvo existencia real y comenzó
a desarrollarse.
Seguramente
de no haber sido Miguel
Bayona en algún momento
hubiera sido otro quien
tomara el compromiso, pero
tal vez hoy en día
este grupo no existiría…”
“…con
su empuje y ganas de hacer
cosas le cambió la
vida al grupo, trató
de organizar mejor el grupo,
comenzó a editar
el Boletín, tomó
contactos personales y telefónicos,
organizó las cosas
para quienes no tenían
acceso a Internet recibieran
materiales y muchas otras
cosas que no es necesario
comentar. Y todo esto sin
contar los cambios que introdujo
en la página Web...
Es decir que este grupo
había encontrado
el motor que le hacía
falta. Pero sobre todo pudiendo
monopolizar los méritos
fue capaz de integrar a
otros compañeros,
compartir y delegar responsabilidades
con ellos y abrir el grupo
a las provincias desde donde
vienen empujando con fuerza
varios embriones de grupos
o asociaciones.”
[Miércoles, 9 Julio
2008-15:28]
A romper el hielo,
la primera cita
Las palabras para describir
nuestra primera cita son
“FRACASO TOTAL”.
Si, no se asusten que es
verdad.
Cuando
me percaté que el
grupo se incrementaba, decidí
convocar a todos los miembros
de Ciudad de La Habana a
una reunión. La primera
cita sería en el
Acuario Nacional a las 10am,
las razones muy simples,
uno porque es una de las
áreas temáticas
que más tiene que
ver con nuestra afición
y la segunda, para que todos
aquellos que fuesen, solo
o acompañados, pudieran
disfrutar de las actividades
que allí se realizan.
Llega
el día acordado,
el domingo 22 de mayo y
solo Juan Miguel Alonso
Torres con su familia se
presentó. ¡Qué
pena! Dirán ustedes.
Para nada, solo que el viernes
20 de mayo había
enviado un aviso para suspender
la reunión porque
varios no iban a poder asistir.
Por suerte para “Juanmi”
y familia la actividad formal
se convirtió en un
ameno paseo por el acuario
después de una larga
espera.
Este
fracaso no me hizo desistir
y no tardé en citar
para un nuevo encuentro.
Esta vez sería en
un lugar más céntrico,
Coppelia, la gran heladería
de Cuba. Los que estuvimos
presentes nos concentramos
en el parqueo del establecimiento.
Sin temor a equivocarme
fuimos cinco los que rompimos
el hielo: Eugenio Armero
Veliz, Alex Pérez
Borges, Juan Miguel Alonso
Torres, Alejandro Cabreras
Rodríguez con su
esposa Nadia y quien les
escribe, Miguel S. Bayona
Valentín. La conversación
fue muy amena, reproducción
de peces, montaje de acuarios
y hasta experiencias con
reptiles e insectos. Encuentros
como este y con los mismos
se repitieron un par de
veces más. El resto
no se atrevía a salir
del anonimato y del teclado.
Primer paso en firme, la
Junta Directiva
Pasado los meses, me acerque
al acuario de la Habana
Vieja, que ya con posterioridad
había conocido al
Lic. Leopoldo Tápanes,
para pedirles si podían
acoger la reunión
de nuestro intento de club.
El director por aquel entonces
y Leopoldo accedieron a
la petición y las
reuniones se volvieron mas
sistemáticas, ganando
en cada encuentro uno o
más miembros hasta
llegar a los 30. Ahí
aparecieron Omar Iruela
González, Manuel
Rodríguez Grenet,
Alexis Martínez Terrero,
Oscar M. Villa Jiménez
y Héctor Montalvo,
por mencionar algunos de
los que aun continúan
en el Club. El acuario se
nos hizo tan pequeño
que en las reuniones hubo
gente que se quedaba de
pie hasta el final. Manuel
nos brindo un espacio en
casa de sus suegros y estos
nos acogieron con los brazos
abiertos.
Pasado
el año 2006 el grupo
se propuso nuevas metas,
pero para poder llevar a
cabo estas tareas necesitábamos
organizarnos estructuralmente.
La primera junta directiva
se conformó el 4
de marzo del 2007 quedando
de la siguiente manera:
Omar
Iruela González
Representante Oficial del
grupo “El Acuarista
Cubano” ocupando el
cargo equivalente a la presidencia.
Manuel
Rodríguez Grenet
Tesorero del grupo.
Miguel
S Bayona Valentín
Diseñador, Editor
y Redactor del Boletín
Informativo “El Acuarista
Cubano” y Relaciones
Públicas del grupo.
Alexis
Martínez Terrero
Responsable de la Biblioteca
digital e impresa del grupo.
Alex
Pérez Borges
Responsable de la cuarentena
de los peces que sean introducidos
al país a través
del grupo.
Con
esta estructura el grupo
trabajó por un periodo
de dos años, gestionado
reuniones con diversas instituciones
en busca de la respuesta
al principal objetivo que
se había trazado,
la legalización del
grupo como Asociación.
Nos abrieron sus puertas
centros como NACARI, Instituto
de Medicina Tropical “Pedro
Kourí” (IPK),
MINAGRI, MINJUS, la Asociación
Nacional Ornitológica
de Cuba (ANOC) Oficina del
Historiador de Ciudad de
La Habana (OHCH) y la Dirección
de Patrimonio Cultural,
pero las respuestas en algunos
casos no eran muy halagüeñas
para el destino del club.
A pesar de todo el esfuerzo
realizado por la Junta Directiva
por conseguir la legalización,
esta sigue siendo una asignatura
pendiente.
No todo es desastre
Al margen de la legalización,
el grupo realizaba otras
tareas como los trabajos
de campo, intercambios de
peces y plantas, la emisión
del Boletín informativo
y la actualización
del sitio Web. También
por esa época comenzaba
la circulación de
nuestra biblioteca digital
compuesta por los CD “Bellonda”,
CD “Pompeya”
y otros materiales descargados
de Internet y un ciclo de
conferencias libre para
todos los interesados. En
cada reunión se mostraban
las estadísticas
de los accesos al sitio
Web, se comentaba sobre
de alguna especie en especifico
y se mostraba algún
que otro documental.
Desde
Villa Clara comienzan a
llegar los primeros trabajos
de estudio, colecta de peces
cubanos y la reproducción
del Rivulus cylindraceus.
Con un poco mas de suerte,
el grupo de Villa Clara
se acerca a la Estación
Hidrobiológica “Felipe
Poey” del Parque Nacional
Cienaga de Zapata, con quienes
se ha establecido un vinculo
estrecho de trabajo y colaboración.
Para no quedar atrás,
Ciudad de La Habana se suma
al reto con la captura y
reproducción del
Cubanichthys cubensis.
El
interés por la ictiofauna
dulceacuícola cubana
nos abrió las puertas
del IPK, participando en
la discusión de Tesis
de Maestría de la
Msc. Natividad Hernández.
Allí nos regalaron
uno de los mas preciados
tesoros del club, nuestro
primer Kryptolebias marmoratus.
Especie que fue reproducida
con éxito y distribuida
entre varios miembros del
club e instituciones como
la Universidad de La Habana
(Facultad de Biología)
y a la Estación Hidrobiológica
“Felipe Poey”.
También
se recibieron visitas de
algunos miembros del Club
que radican en diferentes
provincias como Villa Clara,
Camagüey, Granma y
Santiago de Cuba, así
como de nuestra parte se
realizó una a Villa
Clara, Holguín y
Granma. Por ultimo, no podemos
dejar de mencionar el intercambio
entre cubanos y amigos de
Argentina, Uruguay, Puerto
Rico y España. Gracias
a ellos contamos con una
serie de revistas y libros
entre otras cosas.
Inicio de un nuevo ciclo
Después de casi 3
años de actividad,
2 años con Junta
Directiva, se realizan nuevas
elecciones el 7 de diciembre
del 2008. El único
cambio se dio en la presidencia,
ganando Manuel el cargo
de Presidente del Club por
un voto de diferencia, por
lo que Omar Iruela pasó
a encargarse de la tesorería.
Antes,
por el mes de febrero del
2008, Manuel visita Holguín
y se establece por primera
vez un estrecho vínculo
de colaboración entre
las dos provincias, así
como nuestro apoyo incondicional
a Ángel Sancesario
y sus proyectos en Bayamo
(Granma). Otra provincia
que no se quedaría
atrás es Santiago
de Cuba, en el mes de septiembre
se formaba de manera oficial
el Club de aficionado al
acuarismo con el apoyo del
Club de la capital.
Por
el mes de octubre nos invitan
a participar en el Taller
Nacional sobre Humedales
“Zapata 2009”
que se realizaría
del 2 al 4 de febrero. En
mi opinión, esto
es una de respeto al trabajo
que se ha venido realizando
con las especies acuáticas
cubanas. El Club “El
Acuarista Cubano”
presentó 7 de los
15 trabajos que se expusieron
en la comisión de
“Manejo de peces en
humedales” y además
de tener la oportunidad
de compartir con un grupo
importante de especialistas
y científicos de
primer nivel.
Aprovechando
esta coyuntura, se trajeron
al grupo varias personalidades
para hacer debates o mostrar
en las reuniones los videos
de las conferencias del
taller.
De
la cima a la crisis
Luego de agosto del 2009
el grupo cayó en
una cierta monotonía
que llevo a ciertas discordancias
y desunión dentro
del seno de la Junta Directiva.
El tema legalización,
resuelto para algunos de
los grupos del interior
del país con el apoyo
de los gobiernos provinciales,
sigue siendo un problema
sin resolver para el club
capitalino. Hay que señalar
también que la falta
de comunicación,
los intereses personales
y decisiones mal tomadas
se figuró con el
éxodo y la desmotivación
de muchos de los seguidores
del hobby.
Todo
esto implicó un largo
retraso de los boletines,
la mala planificación
de los trabajos de campo,
las continuas inasistencias
a las reuniones y otras
indisciplinas que fueron
llevando al club a una crisis
jamás pensada. Mientras
los grupos de provincia
se hacían más
fuertes, todo presagiaba
que el Club de la capital
no tendría más
continuidad. Un llamado
de atención por parte
de los más jóvenes
inyectó nafta en
la Junta Directiva, obligando
a llevar desde marzo del
2010 un proceso de rectificación
para ganar el terreno que
se ha perdido.
Sumar
nuevos miembros con los
que se pueda trabajar, recuperar
las conferencias y las actividades
colectivas, dar un mayor
dinamismo a las reuniones
es parte de las nuevas metas
que se propone el club.
Conjuntamente a este proceso,
se ha habilitado en el foro
del periódico El
Invasor (www.invasor.cu)
una sección para
que todos los cubanos que
no cuenten con Internet
(Nacional) puedan compartir
sus experiencias y a su
vez tengan a su alcance
el material que se halla
disponible en nuestro Sitio
WEB “Cuba en el Acuarista”
(www.elacuarista.com/cuba).
Para
finalizar, solo me queda
agradecer y felicitar a
todos los que de una forma
u otra han participado de
este hermoso proyecto por
el cual nos tildaron un
día de “locos
e insistentes aficionados
a los pececitos”.
Bibliografía:
Archivo del Club
de Acuarismo”El
Acuarista Cubano”
-
Correspondencias
-
Actas de reuniones
-
Otros documentos internos
|